#12 A pesar de las dificultades, confía en que tu ‘estado actual’ te ayudará a solucionar los problemas. El entrenamiento te ayudará a llegar a tu ‘estado actual’ en situaciones estresantes (emocional)
Por Emilio Sánchez Vicario, CEO y Fundador de Academia Sánchez-Casal.
Michelle Konkoly desprende energía positiva y determinación. La atleta de 24 años vio cumplido su sueño este verano al proclamarse ganadora de 4 medallas en los Juegos Paralímpicos de Río, además de batir 2 records: en la categoría de los 100 metros libres (S9), y en la de los 50 metros libres (S9).
Procedente de Pensilvania, su vida dio un giro de 180 grados en 2011. Konkoly formaba parte del equipo de natación universitario de Georgetown. En su primer año como estudiante sufrió un grave accidente al caer desde su dormitorio de 5 pisos, fracturándose varios huesos y sufriendo una lesión medular. Quedó paralizada de cintura para abajo.
“Después del accidente, tuve que adaptarme a mi nuevo cuerpo. Primero, en una silla de ruedas, después en un caminador, posteriormente sometiéndome a una rehabilitación intensa. Pero cuando aún me encontraba en el hospital, ya estaba determinada a reincorporarme a mi equipo de natación, y así lo comuniqué a mi entrenador’, afirma Konkoly.
Ocho meses más tarde, consiguió volver a nadar junto a sus compañeros de equipo y llegó a ser co-capitana. Sin embargo, el rápido progreso que había experimentado se ralentizó. Y entonces se dio cuenta de que sus piernas ya nunca volverían a ser las de antes.
“Ese momento fue duro para mi. Competía y siempre quedaba la última. Soy una atleta y como tal soy competitiva, me gusta esforzarme para ganar, y no lo estaba consiguiendo”.
Y entonces, descubrió el deporte paralímpico. Y decidió marcarse unos objetivos. A largo plazo, competir en los Juegos Paralímpicos. A medio plazo, triunfar en los Campeonatos Nacionales. Y a corto plazo, cada día, dar lo mejor de si para conseguirlo.
Cuando se clasificó para participar en los Juegos Paralímpicos de Rio 2016 dedicó los 18 meses previos a entrenar diariamente, junto a su entrenador de natación Paul Yetter, y junto a Derek Touchette, director de fitness de Academia Sanchez-Casal en Florida, y en quién depositó su confianza para maximizar su condicionamiento físico.
“Cada día, quería trabajar tanto como me fuera posible. Me centré mucho en mi fuerza mental, y en el mindfullness”. Para lograrlo, explica que intentaba concentrarse en el momento, estar relajada. Pensar paso a paso en lo que estaba haciendo: ponerse el bañador, realizar la rutina física, comer, dormir. Apuntaba en un diario cada uno de estos pasos, y al final del día los repasaba para valorar su rendimiento.
El resultado de ese entrenamiento dio sus frutos el pasado septiembre. Michelle ganó una medalla de oro en los S9 100 metros libres, un segundo oro en los S9 50 metros libres, una de plata en los 4 × 100 metros estilo libre 34 puntos, y una de bronce en los 4 × 100 metros combinado 34 puntos.
La nadadora afirma que había visualizado la competición y la victoria cada noche antes de dormir durante un año y medio. La visualización fue una parte fundamental de su éxito, ya que le aportó confianza, ánimos y la convicción de que estaba preparada para ello.
‘Si me preguntan si iría atrás en el tiempo para borrar de mi vida mi accidente, respondo que no. Ese suceso hizo que encontrara dentro de mi la determinación y el optimismo que todos tenemos dentro, y que podemos utilizar como herramientas contra la adversidad. El accidente optimizó las habilidades y que yo ya tenía. Me dije, ‘Soy una buena atleta. Ahora, voy a ser una excelente atleta’.
Michelle Konkoly es un claro ejemplo de cómo a pesar de las dificultades a las que podamos enfrentarnos creer en el estado actual, marcarse y visualizar unas metas y entrenar para conseguirlas puede ayudarnos a llegar a nuestro estado ideal. En su caso, convertirse en una excelente atleta, y triunfar en los Paralímpicos. Gracias Michelle por compartir tu historia, que de seguro inspirará a otras personas.
Emilio Sánchez Vicario
CEO & Founder at Sánchez-Casal Academy
Gracias a Susana Zaragoza, co-autora de este post.
